Irlanda del Norte: Qué hacer en 4 días
Algunos tips a tener en cuenta:
Alquilar un coche para recorrer el lugar está muy bien, las carreteras están en buen estado y todo está muy bien planificado y es muy accesible. OJO: conducir al otro lado es un gran reto, al menos personalmente. Me tocó tener que conducir durante los 4 días y fue bastante estresante, no es hasta el 3er día que te vas acostumbrando a la vida al revés. Es muy desafiante.
Si alquilas coche en cualquier viaje, acuérdate de revisar tu carnet de conducir antes de ir y de que esté vigente. Parece una tontería pero ya ha pasado de llegar al destino y que no te puedan dar el coche porque el carnet está vencido.
Prácticamente no vale la pena cambiar dinero ya que en todos lados se puede pagar con tarjeta. Recordar que son Libras Esterlinas, no Euros.
Es muy niños ‘friendly’, fácil de recorrer, mucha naturaleza, las atracciones son muy accesibles.
Irlanda del Norte es muy pequeña, se recorre de una punta a otra en un máximo de 4h en coche.
Nosotros fuimos a principios de septiembre y el tiempo estuvo increíble. Tuvimos unos 22-26 grados de máxima y soleados, menos el último día que se nubló e hizo un poco de viento. Aunque nosotros tuvimos suerte y no nos llovió mucho, el clima es bastante impredecible, así que lleva siempre ropa que puedas usar en capas, una chaqueta impermeable y calzado cómodo para caminar.
Duración del viaje: 4 días no son suficientes para ver todo lo que ofrece el pequeño país, yo me quedé con ganas de por lo menos 2 días más. Si puedes, intenta alargar tu estancia. Cuatro días son suficientes para ver lo básico, pero hay tantas caminatas, acantilados y rincones por explorar que seguro te quedarás con ganas de más.
En la Calzada del Gigante, no es necesario ir al museo o contratar un tour, se puede ir y visitar perfectamente sin tour ni visita al museo. Nosotros estacionamos el coche en el ‘Hotel Causeway’ y fuimos caminando hasta la calzada y luego por los acantilados desde arriba. Espectacular! Aquí estuvimos unas 4h.
En Belfast, vale la pena hacer un ‘free walking tour’. Dura unas 2h y está muy bien para entender un poco mejor el contexto y la historia del país y la ciudad.
A veces, es conveniente por tema de precios en los vuelos, volar a Dublín, alquilar un coche e ir hasta Irlanda del Norte. Belfast está a 1:40h de distancia solamente. No hay frontera como tal, es como si fuera el mismo país lo único que los distingue es que en las señales pasan de poner las distancias en km a ponerlas en millas.
Si lo tuyo no es conducir o no te atreves por el tema de conducir al contrario, desde el aeropuerto de Dublín hay autobuses que te llevan directamente hasta Belfast. En Belfast puedes ir hasta donde quieras en transporte público o reservando algún tour.
Qué hacer?
Día 1:
Después de instalarnos, comenzamos nuestro recorrido por Belfast. Esta ciudad, cargada de historia y vibrante energía, se explora mejor a pie, por lo que decidimos hacer un Free Walking Tour. Si tienes tiempo, te lo recomiendo muchísimo; fue una manera genial de conocer los lugares más emblemáticos de la ciudad y entender mejor su historia reciente, especialmente los años del conflicto entre católicos y protestantes.
Nosotros reservamos el tour en Civitatis, los hay en Español y valen mucho la pena! El que hicimos nosotros tiene disponibles varias horas, y duran unas 2h. En el tour recorrimos los siguientes sitios:
Ayuntamiento de Belfast
La Casa de la Ópera
The Crown Bar
Memorial a los difuntos del Titanic
Plaza Victoria
Albert Memorial Clock
Escultura del “Gran Pez”
Puerto de Belfast
Además de la historia, pasear por las calles de Belfast es un verdadero placer. La ciudad tiene una vibra única, con mezcla de pasado y modernidad que la hace muy especial. Nos dejamos llevar por sus callejones, el encanto de sus pubs y la amabilidad de su gente.
Día 2:
El segundo día lo comenzamos en el Titanic Belfast, el museo dedicado al mítico barco que se construyó en esta ciudad. Es impresionante y te transporta a la época de una manera muy real. Asegúrate de dedicarle unas 3 horas para recorrerlo a fondo, ¡vale muchísimo la pena! Nosotros sacamos las entradas online aquí.
De allí, nos dirigimos a uno de los lugares más mágicos del viaje: The Gobbins Path. Este sendero a lo largo de los acantilados es espectacular, con vistas al mar de vértigo y una ruta que te dejará sin palabras. La experiencia dura unas 2,5 horas y necesitas reservar con antelación. Si te gustan los paisajes dramáticos, ¡te encantará!
Ya por la tarde, seguimos nuestra ruta por la carretera de la costa, en la que los paisajes son muy bonitos y te hacen el viaje muchísimo más ameno, hasta llegar a Ballycastle, donde nos alojamos en el Fullerton Arms Hotel. Este hotel no solo es acogedor, sino que su restaurante es increíble, con comida deliciosa que te reconforta después de un día largo de exploración.
Día 3:
Uno de los platos fuertes del viaje fue, sin duda, la Calzada del Gigante. Este lugar es de esos que parecen sacados de una película, y aunque hay bastantes turistas, sigue siendo un sitio mágico. Recomiendo caminar por los senderos que suben por los acantilados para disfrutar de unas vistas increíbles. Estuvimos aquí unas 4 horas, ¡y no nos arrepentimos!
Aparcamos en el Causeway Hotel, donde pagas 10 libras por el aparcamiento, pero puedes usar ese crédito en el hotel, lo que hace que recuperes de la caminata con algo rico para picar o comer, o un ‘dulcito’ para cerrar con broche de oro la visita.
De vuelta hacia Belfast, hicimos una parada en The Dark Hedges, famoso por aparecer en "Juego de Tronos". Los árboles tienen una forma única y crean una atmósfera casi mística. Si eres fan de la serie, este lugar te resultará especialmente emocionante.Nosotros fuimos sobre las 5 pm y había gente pero no tanta como para no poder disfrutar del sitio.
Día 4:
Nuestro último día en Belfast lo empezamos con un delicioso desayuno en el Harlem Café, un lugar con una decoración súper rococó que, sorprendentemente, no molesta. La comida estaba riquísima, y fue el sitio perfecto para empezar el día.
Después de desayunar, visitamos el Mercado de San Jorge, un mercado cubierto con un ambiente genial, donde puedes encontrar productos locales, artesanía, souvenirs y muchas cosas interesantes. Paseamos un poco más por el puerto de Belfast antes de coger el coche de vuelta a Dublín para nuestro vuelo de regreso.
Dónde quedarse?
Las mejores zonas para quedarse en Belfast dependen de tus intereses y presupuesto. Aquí tienes algunas opciones populares:
1. Centro de la ciudad
Ideal para: turistas que desean estar cerca de las principales atracciones.
Ventajas: Estarás a poca distancia de lugares emblemáticos como el Ayuntamiento, el Museo del Titanic, la Catedral de Belfast y los mejores restaurantes, bares y tiendas.
Recomendado: si prefieres la comodidad de caminar a todas partes y disfrutar de una animada vida nocturna.
2. Queen's Quarter
Ideal para: aquellos interesados en cultura y un ambiente relajado.
Ventajas: Este barrio es hogar de la Universidad de Queen’s y el Jardín Botánico, además de muchos cafés, bares y restaurantes con un aire bohemio.
Recomendado: si te gustan las áreas universitarias y más artísticas.
3. Cathedral Quarter
Ideal para: los amantes de la vida nocturna y el arte.
Ventajas: Es el centro cultural y artístico de Belfast, conocido por su gran cantidad de bares, galerías y arte callejero. Es perfecto para disfrutar de música en vivo, pubs tradicionales y eventos culturales.
Recomendado: si disfrutas de una vida nocturna vibrante y un ambiente más alternativo.
4. Titanic Quarter
Ideal para: quienes buscan una zona moderna y tranquila cerca del agua.
Ventajas: Aquí se encuentra el Museo del Titanic y la zona es una mezcla de historia y modernidad. Es ideal para familias y parejas que prefieren una estancia más tranquila pero cerca del centro.
Recomendado: si te interesan la historia marítima y las zonas modernas junto al río.
En resumen, el Centro de la ciudad o el Cathedral Quarter son perfectos si prefieres estar cerca de todo, mientras que el Titanic Quarter y Queen's Quarter ofrecen experiencias más tranquilas o culturales.
Para mi, la mejor zona donde quedarse es el centro o el Cathedral Quarter que la zona verde oscuro en el mapa, incluye ambos barrios, y para los días que propongo pasar en Belfast en este itinerario es lo mejor para tenerlo todo a mano y no perder tiempo.
El mejor área para quedarse si vas más al norte es la zona en verde, aunque debo destacar que Ballintoy está justo en el centro de las cosas más importantes que ver por allí, como por ejemplo la Calzada del Gigante, el Puente de cuerda de Carrick-a-Rede y The Dark Hedges. SI tienes más días para visitar la zona entonces cualquier parte de la zona norte es conveniente.
Qué y dónde comer?
La comida en Belfast es una mezcla de tradición irlandesa, productos locales frescos y una creciente escena culinaria moderna e internacional. En las últimas décadas, la ciudad ha visto un renacimiento gastronómico, con chefs que destacan los ingredientes locales de alta calidad, como los mariscos frescos, carnes de granjas cercanas, y productos agrícolas autóctonos.
Platos Tradicionales: La comida tradicional en Belfast tiene una fuerte influencia de la cocina irlandesa, pero con particularidades de Irlanda del Norte:
Ulster Fry: El desayuno típico de la región, más contundente que el clásico "full Irish", incluye pan de soda y pan de patata.
Irish Stew: Un estofado de cordero o ternera con papas y zanahorias, que es una receta tradicional reconfortante.
Boxty: Un tipo de panqueque de papa que es muy popular en las regiones del norte de Irlanda.
Champ: Puré de papas con cebolletas y mantequilla, ideal como guarnición.
Seafood Chowder: es uno de los platos más representativos y reconfortantes de la gastronomía irlandesa, especialmente en ciudades costeras como Belfast. Es una sopa espesa y cremosa elaborada con una mezcla de mariscos frescos, lo que la convierte en un plato muy popular tanto entre locales como turistas.
Bebidas Típicas:
Guinness o cerveza local como Hilden Brewery.
Whiskey irlandés: como el de la destilería Bushmills.
Cafés y Postres
Barmbrack: Un pan dulce tradicional irlandés con pasas.
Scones con mermelada y crema: Ideal para acompañar con un buen té o café.
En el mapa que hay a continuación están los restaurantes a los que hemos ido y otros que tenía anotados pero no nos dio tiempo a probar aunque seguro están geniales porque tenían una pinta buenísima. No es barato comer aquí, por comensal se paga una media de entre 30-50€ por comida.
Irlanda del Norte es un lugar que combina lo mejor de la naturaleza y la historia. Sus paisajes verdes y dramáticos te roban el aliento, mientras que ciudades como Belfast te envuelven con su pasado y presente vibrante. Es un viaje que te deja con ganas de más, y estoy segura de que volveremos para explorar todo lo que nos quedó pendiente. Si te animas a visitar, ¡cuéntame cómo te fue!
Recordatorio para usar el mapa: en el mapa pueden seleccionar la parte que más les interese: qué hacer, dónde y qué comer, dónde quedarse, solo hay que hacer ‘checks’ en las cajitas que hay en el lado izquierdo de los títulos.